En respuesta a las declaraciones del Concejal de Juventud José Antonio Maturana respecto de la inclusión de la publicidad de un prostíbulo en la publicidad del festival CONECTA.
En primer lugar nos gustaría saber dónde se esconde el señor Pagola y porqué no es capaz de dar la cara en un tema de su última responsabilidad.
Responde el señor Maturana a nuestra denuncia diciendo que los folletos fueron retirados cuando supieron de la existencia de este anuncio. En primer lugar, desde este grupo municipal nos hemos puesto en contacto con diversos establecimientos hosteleros en los que este mismo fin de semana todavía se podía ver folletos si se han puesto en contacto con ellos para retirarlos. En ninguno de los casos nadie se ha puesto en contacto con ellos ni en persona ni por teléfono ni de ninguna forma para solicitar la retirada de la exposición pública de los folletos ni, por supuesto, han pasado a recogerlos. Y en segundo lugar… miente al dejar entrever que desconocían la presencia de este anuncio pues ya en la edición de 2007 aparecía.
Esperamos que al menos no saquen a la calle los folletos que todavía no han sido repartidos.
También argumenta el edil que el ayuntamiento y la concejalía de la que es titular sólo colaboran con la organización y no ORGANIZA el evento. Bien, publicamos la página 3 del folleto donde aparece claramente tanto el escudo del ayuntamiento cómo el logotipo de la concejalía de juventud sobre el texto ORGANIZA. Exactamente igual que en los carteles que podemos ver por toda la ciudad. Así mismo aparecen 5 patrocinadores (entre ellos el Instituto Riojano de la Juventud) y 10 colaboradores.
Efectivamente tal y cómo comenta el concejal de juventud la señora Garrido conoce perfectamente cómo funciona la concejalía de juventud del ayuntamiento de Calahorra.
Es costumbre de esta y de otra áreas la de usurpar el trabajo de asociaciones, empresas y voluntarios que realizan una importante actividad organizando eventos. Trabajo que es explotado por parte del equipo municipal mediante la inclusión de sus logotipos y la aparición de los concejales del PP en las fotos de esas actividades con el único objetivo de aparentar ser responsables de la actividad cuando lo único que hacen es ir a hacerse fotos.
El Partido Popular tanto a nivel local cómo autonómico fagocita el trabajo de cualquier persona que desea hacer algo por su comunidad para más gloria de los políticos populares que engordan su ego con fotografías en dichos actos, excretando a la sociedad tan solo sus propios desechos pues sólo apoyan el trabajo de aquellas asociaciones de las que pueden sacar algún rédito persiguiendo y desprestigiando a las que no.
El señor Javier Pagola y su equipo de gobierno para maquillar su falta de trabajo se aprovechan del que realizan los demás. Si miramos la programación cultural de verano… ¿Cuántas de esas actividades están verdaderamente organizadas por el área de cultura? ¿Cuántas las organizan asociaciones, bares, peñas..? La concejalía de festejos… de todas las actividades del programa de fiestas, si quitamos las que realizan las peñas, empresas y asociaciones ¿Cuántas son organizadas verdaderamente por la concejalía? Les invitamos a hacer un cálculo con el programa de fiestas en mano.
Ya es hora de asumir responsabilidades, cuando en un folleto aparece que una actividad está organizada desde el ayuntamiento de Calahorra y desde la concejalía de juventud significa que el ayuntamiento es tan responsable como la empresa Kiko Vinilo tanto si la actividad es un éxito cómo si se produce un hecho tan aberrante cómo el que se ha producido. Ya vale de ponerse medallas cuando va bien y tirar balones fuera cuando no es así.
De todas formas nos preguntamos dónde están el resto de responsables, Javier Pagola, Javier Merino, Emilio Del Rio y Pedro Sanz. ¿Piensan dar la cara y ofrecer explicaciones?
Finalmente, nos alegra en cualquier caso que el señor Maturana manifieste que el consistorio se posiciona totalmente en contra de la explotación sexual de las mujeres pero las palabras se la lleva el viento. Lo que vale son los hechos y publicitar un prostíbulo en una publicación destinada a los jóvenes es transmitir a la juventud que la prostitución es aceptable normalizando una actividad ilegal. La transmisión de estos valores mediante un folleto destinado a nuestros jóvenes es favorecer la explotación sexual de la mujer por mucho que manifieste lo contrario.