Pagola un ejemplo de improvisación y despilfarro

Gracias al gobierno de España Calahorra ha contado con 2.600.000€ para la realización de inversiones en nuestra ciudad (Real Decreto Ley 13/2009 de 26 de octubre).

Estado actual de las oficinas

El equipo de Javier Pagola anunció a finales de 2009 los proyectos a los que se destinaría esa ingente cantidad de dinero, entre ellos la remodelación de la planta baja del ayuntamiento de Calahorra.

En primer lugar hemos de señalar que el proyecto ha sido deficiente puesto que no se han acometido reformas claramente necesarias como la mejora de la eficiencia energética.

De nuevo Pagola despilfarra el dinero de los Calagurritanos gastando más en el continente que en el contenido, gastando más en “parecer” que en “ser”. Esto se demuestra con las ventanas, están deterioradas hasta el punto de que algunas no se pueden cerrar y en lugar de sustituirlas se limitan a una mano de pintura, eso sí, en colocar logotipo si que han derrochado, será para amortizar los 20.880€ que costó.

Ventana vieja y rota / Logotipo nuevo

Podemos hablar claramente de improvisación, tras aprobar el proyecto para la remodelación de las oficinas en Junta de Gobierno del 1-2-2010, tras su construcción en tiempo y forma, las obras han sido recepcionadas en Junta de Gobierno de 13-9-2010. Es en ese momento en el que se aprueba el equipamiento de las mismas, algo que creemos que se debiera haber realizado con mucha anterioridad. Y pone en clara evidencia la dejadez de Pagola y la improvisación que solo se actúa cuando ya no queda más tiempo.

Pagola nos anuncia que las oficinas reformadas se pondrán en marcha en Enero de 2011, y esto se debe a la falta de previsión y a la improvisación que todavía 10 meses después de decidir las obras a realizar no saben lo que quieren hacer con la oficina y con los trabajadores, debiera ser el centro de atención ciudadana, pero vemos como a Pagola no le interesa el ciudadano, como es incapaz de hacer un reglamento de participación ciudadana, que lleva siete años para realizarla, y aun no sabe decidir cuales van a ser las funciones de los trabajadores que allí trabajen.

Para finalizar queremos recordar que gobernar es prever, y tomar decisiones, que no consiste en estar apoltronado en un sillón viendo pasar el tiempo y ha llegado el momento de que deje el sillón porque se ha convertido en un alcalde agotado que es el problema de muchos de los problemas de Calahorra en lugar de la solución.